La Comunicación Interna y Externa, Mejora la Imagen?

Según el autor Thomas Garbett la imagen corporativa es el estado de opinión que resume la percepción que un determinado público tiene de una organización a partir de la síntesis de tres puntos básicos: el comportamiento de la organización, su cultura y su personalidad corporativa.

Para lograr tener una buena imagen debe existir coherencia entre lo que la empresa intenta manifestar y lo que sus empleados expresan de ella (auto imagen), eso nos hace entender que la imagen se construye y comunica desde adentro, por lo cual es imposible separar a la comunicación de la imagen. Pues por medio de lo que la empresa comunica conciente e inconcientemente se refuerza o contradice la idea que el público tiene de ella; todos los mensajes y comunicaciones que emite forman parte de su cultura e identidad.

Esto repercute desde la manera en que los trabajadores conciben su lugar de trabajo, hasta la aceptación que generen los productos que ofrece la empresa en el mercado; su posicionamiento, la preferencia ante los competidores (fidelidad), así como su permanencia en la mente de los consumidores ¿y por qué no? también en la de los no consumidores. Esto se logra mediante el impacto de los mensajes emitidos al público y la forma en que se genera en ellos la reacción deseada por la organización (consumo de bien o servicio).

Es importante saber que dependiendo de lo que se comunica será la percepción positiva o negativa, así como de rechazo o aceptación que tendrá lo que se pretende vender u ofrecer a los clientes potenciales. Dependiendo de los mensajes emitidos hacia el público respecto a la organización, se estará manifestando a qué tipo de mercado se dirigen sus productos o servicios. Marcando la pauta para amoldar la estrategia para el tipo de imagen favorable, que por medio de la comunicación se va a proyectar, esto sin perder la verdadera identidad y personalidad de la empresa, lo cual debe prevalecer ante todo. Un punto importante es lograr que lo que se le comunica al público se concretice en algo tangible, para así llegar a ser la empresa o producto que el publico busca.

Se ha demostrado notablemente que las empresas que hacen énfasis en la comunicación tanto interna como externa trascienden, llegando a ser las de mayor rentabilidad y mayor posicionamiento ante el público, lo cual asegura su permanencia y solidez a través del tiempo.

En conclusión podemos inferir que tanto la comunicación interna como externa influyen de manera significativa en la imagen corporativa, ya que por medio de ellas se construye y dispersa tanto la identidad como la personalidad de la empresa, así como aquello que la hace ser superior a las demás mostrándola como la opción idónea entre los competidores.

Actividades realizadas para la comprensión del tema

Proyección y análisis de la película "Mi encuentro conmigo". En esta actividad los alumnos pudieron comparar la imagen personal del protagonista con la de una empresa; que desde la niñez se cimienta desde el interior con la intracomunicación y lo que se comunica al exterior, esto lo podemos relacionar con los inicios de una empresa en donde la imagen no es aún definida, pero que a lo largo del tiempo se va fortaleciendo siempre encaminado hacia los objetivos, lo que el protagonista dejó a un lado. El hecho de que rusty se haya visto a sí mismo nos infiere que las empresas deben hacer un análisis sobre los objetivos que tenían en un principio y si todas sus acciones se están encaminando a ellos, ¿qué es lo que están comunicando tanto al interior de sí mismas como al exterior? y si esto está beneficiando a la imagen que se desea proyectar.
Presentación del tema mediante diapositivas: Con esto se expuso desde un plano teórico el paradigma, para el logro de una mayor comprensión de los conceptos(comunicación interna, comunicación externa e imagen corporativa) de manera que se pudiera comprender cómo están interrelacionados y no se puede llegar a formar una imagen positiva si no se toma en cuenta lo que se esta comunicando.
En base a productos se pudo analizar cómo la imagen influye la percepción de las personas, mediante algunos ejemplos en donde se pone mayor énfasis en la imagen. tal es el caso en la industria automotriz: donde por un lado tenemos el Mustang el cual tiene una imagen imponente y con un diseño que incita a la velocidad, y por otro lado al Tsuru que tiene un óptimo rendimiento, es económico y durable, pero carece de un diseño vanguardista y atractivo hacia el público. Aquí podemos ver la aceptación que genera una buena imagen (Mustang), en donde se hace a un lado las cualidades primordiales de un vehículo y se da mayor importancia a la imagen que proyecta lo cual en ocasiones resulta contraproducente. Pues como sabemos el Tsuru es un auto de mayor rendimiento y el Mustang resulta muy costoso su mantenimiento pues éste es de ocho cilindros y consume mayor cantidad de combustible.

Las relaciones humanas en cualquier contexto tienen como soporte básico la comunicación. Si facilitamos los mecanismos para que se produzca de forma natural y, además, hacemos que esta comunicación se desarrolle en la organización, en un clima ético y de libertad, habremos dado el primer y más importante paso de cuantas actividades se nos presentan en el mundo empresarial.
Desde las organizaciones ha existido y existe una necesidad práctica de influir y motivar a sus profesionales, entre otras razones, para alcanzar los objetivos de producción. Para alcanzar este objetivo, tradicionalmente la comunicación interna ha centrado sus esfuerzos en los canales convencionales y en los emisores. A esto se le añade una mayor preocupación por la información que baja desde la dirección hacia los empleados (comunicación descendente). Su traducción práctica la hemos podido ver en resultados a modo de tablones de anuncio, revistas de empresa, notas internas y reuniones. Por otro lado, la figura del departamento de comunicación interna no ha sido percibida como algo fundamental en muchas empresas hasta hace poco; los roles de los gestores de la comunicación se han ido adaptando desde diferentes perfiles curriculares hasta llegar a configurarse en una disciplina propia, con una función bien definida y un mapa de conocimientos que lo apoyan. Ahora nos encontramos inmersos en una nueva etapa, donde la Sociedad del Conocimiento impone sus reglas y hace emerger nuevas necesidades relacionadas con la comunicación: con una nueva comunicación.
Desde nuestra perspectiva presentamos esta nueva comunicación interna como una estrategia fundamental en la organización. Ampliar el horizonte de la comunicación interna hacia la dimensión del conocimiento compartido y de las relaciones humanas, constituye una apertura y, sobre todo, una respuesta a la demanda y necesidades que tienen las nuevas organizaciones y las personas que las construyen.
La integración de elementos de comunicación interna en la actividad laboral cotidiana, unida a una apuesta firme desde los más altos niveles de la dirección son premisas básicas que se complementan con un soporte tecnológico adecuado y proporcionado a nuestros objetivos, junto a una preparación del entorno social donde se va a desarrollar. Y toda la filosofía que enmarca esta nueva comunicación tiene su resultado práctico en la productividad de la empresa, en la satisfacción del cliente, en hacerla más competitiva, más inteligente y flexible; lo que contribuye en definitiva a la propia supervivencia como organización. Es una nueva visión desde un paradigma humanista la que reduce la diferencia entre lo que es y lo que queremos que sea nuestra sociedad y nuestra organización.

Ricardo Sotillo Hidalgo